Este libro quiere ser una auda para cada día de la Cuaresma, tiempo sereno pausado de preparación para celebrar la Pascua, la cual queda expresada en la cruz de la portada del libro. El azul simboliza el Cielo, el lugar de la Presencia de Dios, que se abre para dejar paso al rojo, que representa el Amor derramado sobre la humanidad. Cristo no se reserva nada para sí, todo Él se entrega. Ahora espera nuestro sí de vuelta porque estamos dotados de libertad.